¿Qué huellas estas dejando?

¿Qué huellas estas dejando?

Por: Sandra Prieto

¿Sabías que nuestros actos comunican, impactan y dejan huellas?

En este tiempo donde nos hemos volcado al uso de las redes sociales para comunicar mensajes…han aparecido un sin número de cursos y tutoriales sobre cómo comunicarnos mejor. La mayoría de estos cursos y tutoriales se han centrado en nuestra comunicación verbal y no verbal, ayudándonos a dar un mensaje claro, ameno y relevante que produzca un impacto y deje huella en la vida de quienes nos vean. Yo misma he hecho uso de estos, para ayudarme a mejorar mis habilidades comunicativas.

Sin embargo, en el último mes he estado reflexionando que, más allá de la expresión verbal y no verbal, nuestros actos también comunican, impactan y dejan huellas en la vida de las personas con quienes interactuamos. Lo que decimos, cómo lo decimos y lo que hacemos, o lo que no decimos y no hacemos quedan registrados en la mente y el corazón de las personas; en otras palabras, dejan huella.

Son como registros fotográficos de los momentos que hemos vivido, que, al revisitarlos, evocan emociones, pensamientos y hasta acciones.

Por ejemplo, el otro día estuve mirando fotos de cuando estuve trabajando con mujeres, desarrollando microempresas, en zonas muy pobres de mi país natal, Colombia. Me remonté sin pensarlo, al pasado, a recordar los caminos que había recorrido en comunidades llenas de polvo y barro; me acordé con nostalgia y alegría de mujeres que conocí en esa época. Recordé la condición de muchas de ellas y, cómo, a pesar de sus circunstancias salían día a día a buscar el pan para sus hogares y, se esforzaban por sacar sus emprendimientos adelante. El pensar en ellas y cómo perseveraban día a día, me motivó para seguir perseverando en una empresa social que inicié hace poco tiempo.

 

Sin duda, ellas, sin saberlo, dejaron una huella profunda en mi corazón.

 

Sin embargo, también me hizo reflexionar sobre las clases de huellas que estamos dejando en la vida de las personas.

Con nuestras palabras y nuestros actos podemos mostrar a otros cuánto valor tienen para nosotros, o cuan poco nos interesan. Nuestras palabras y nuestras acciones dejan huellas y yo las comparo a las fotos, pues, así como las fotos se toman en un instante, lo que decimos y hacemos sucede en instantes, pero pueden dejar un impacto positivo o negativo en la vida de las personas que fueron parte de esos instantes, por largo tiempo.

Ahora, lo que decimos y hacemos no tienen que ser cosas complejas o muy elaboradas, simples acciones pueden dejar un registro imborrable en la vida de las personas.

Por ejemplo, cuando llamas a una amiga o amigo, simplemente para saber cómo está, o cuando decides enviarle un mensaje de ánimo, no porque te lo haya pedido sino porque así lo sientes en tu corazón. O cuando tomas tiempo con tu hijo (a) para escucharle hablar de las cosas que le interesan, así no sean de tu mayor interés… Todo esto les dice a los otros, que son valiosos y que nos interesamos por ellos, dejando una huella en sus mentes y corazones.

Por ejemplo, por varios años, cada mañana, mi hija se levantaba muy temprano, con su papá, para tomar una taza de té verde. Ellos usaban ese tiempo para hablar de libros, economía, cómo ayudar a los más pobres de la tierra, cómo sobrevivir en el bosque y, por supuesto, también tomaban ese tiempo para hablar con Dios y leer la Biblia. Anna se levantaba cada mañana entusiasmada por la posibilidad de aprender algo nuevo y la oportunidad de sentirse especial al tomar té con su papá. Luego de tener esa rutina durante tres años, su papá dejó este mundo, luego de batallar por tres años con cáncer.

En ese entonces Anna tenía 7 años. Hoy, a sus 14 años me conmovió cuando dio una entrevista en un programa de radio al que fuimos invitadas. La presentadora del programa le preguntó sobre las memorias que tenía de su relación con su padre. Adivinen qué: ella mencionó como su memoria favorita el tiempo que tomaba cada mañana con su papá para tomar té verde juntos. En la misma semana de la entrevista, se celebró el séptimo aniversario desde la partida de Steve, y ella conmemoró el aniversario haciendo un dibujo de un momento especial con su padre; así que tomó la decisión de dibujar una taza de té verde. Para alguien que observe el dibujo que ella pintó, significaría que Anna decidió dibujar una taza… pero para ella evocó emociones, pensamientos y acciones… Le recordó que era especial y que alguien tomó el tiempo de interesarse en ella y los temas que a ella le gustaba.

Sin duda, Steve, su papá, dejó en el corazón de nuestra hija, una huella que la acompañará por un largo tiempo.

El pasado, con sus buenos y malos #momentos ya no lo #podemos repetir. Cuando miras una foto, te lleva al pasado, a esa #historia que viviste; evocando diferentes #emociones: #risas, lágrimas, alegría, dolor, y muchas otras cosas…Y aunque ya nos son tu presente, pueden influenciar tu presente y tu futuro.

Por un lado, quiero invitarte a que, si tú eres de las personas que estás viviendo tu presente, evocando el ayer y queriendo que hoy todo fuera como antes, te detengas a pensar que, para avanzar hacia el mañana, no puedes vivir en el ayer. Si el ayer fue doloroso, renuncia a seguir cargando esos episodios en tu mente y tu corazón. Si, por el contrario, fue de mucha alegría y hoy no tienes ese pasado; míralo con gratitud y tómalo como el impulso para mirar al mañana. Piensa qué clase de momentos quieres capturar con el lente de tu mente y corazón, de cara al futuro, pues esto te ayudará a proyectarte hacia el mañana.

Actúa:

Toma una hoja de papel y anota cuáles son las cosas que estás añorando que fueran como antes y que simplemente ya no son así.

Llévalas a Dios y pídele que te ayude a dejar el pasado atrás. Si fue doloroso, pídele que sane las heridas que las huellas de otros han dejado en tu corazón. Dile que ya no quieres que esas huellas determinen tu presente, de cara al futuro.

Ahora, no nos podemos centrar, solamente, en las huellas que otros dejaron en nuestras vidas. Tú y yo también dejamos huellas. Así que, ahora te pregunto, a ti:

¿Cómo quieres que te recuerden en la próxima foto de la que hagas parte?

¿Qué huella quieres dejar en aquellos con quienes compartas nuevos momentos?

Recuerda: ya no puedes cambiar las huellas que has dejado…pero ciertamente puedes determinar qué tipo de huellas quieres dejar en el presente, para impulsar a otros hacia el futuro.

Atesora Isaías 43:18:

<<No recuerden lo que pasó antes ni piensen en el pasado. Fíjense, voy a hacer algo nuevo. Eso es lo que está pasando ahora, ¿no se dan cuenta? Haré un camino en el desierto y ríos en tierra desolada>> (PTD)